Puede que conozcas el comportamiento en carretera de PEUGEOT. Y con razón, ha sido un elemento destacado del periodismo automovilístico durante muchos años. Si bien era conocido por los aficionados, más recientemente se ha democratizado entre el público, gracias sobre todo al éxito del PEUGEOT i-Cockpit, cuyo volante compacto multiplica por diez las sensaciones de conducción. He aquí una retrospectiva de esta característica única, verdadera firma de la Marca del León.

Definir el comportamiento en carretera no es tarea fácil. Si tuviéramos que formular una definición clara y concisa, diríamos que es el arte de combinar un excelente comportamiento en carretera con un placer de conducción de alto nivel. Pero, ¿qué más? El comportamiento en carretera es una característica para la que es crucial un perfecto control técnico del funcionamiento y las interacciones entre el tren de rodaje, la suspensión y los neumáticos. 

En primer lugar, un excelente comportamiento en carretera, garantía de seguridad, al tiempo que se opta por opciones técnicas que garantizan un confort excepcional. En segundo lugar, el objetivo es ofrecer un comportamiento deportivo, sinónimo de placer de conducción, y una dirección precisa y comunicativa que garantice la eficacia de la conducción. Esto nos lleva al corazón del saber hacer de PEUGEOT, que consiste en lograr la mejor síntesis posible de estos elementos. 

El comportamiento en carretera se basa en dos factores. El primero es el saber hacer en materia de amortiguación. Durante mucho tiempo, PEUGEOT fabricó internamente sus propios componentes de suspensión, adquiriendo con el tiempo una experiencia inestimable. Según los ingenieros de Dynamic Synthesis, esta experiencia en el diseño de amortiguadores ha sido clave para dominar la dinámica del vehículo.

Según Gaëtan Demoulin, responsable durante muchos años de la síntesis de chasis y de la síntesis cliente PEUGEOT, el entorno de las carreteras que rodean el histórico emplazamiento de Sochaux/Belchamp es el segundo factor que permite una puesta a punto eficaz, así como comprender el comportamiento en carretera, el confort y el placer de la dirección. Aquí se han llevado a cabo el desarrollo y la validación de todas las gamas. 

Esta característica única de PEUGEOT dista mucho de ser nueva. Aunque el 301 (el primer coche fabricado en serie en el mundo equipado con ruedas delanteras independientes) se remonta a los años 30, fue el 205 GTi el que dio origen a la idea de que un PEUGEOT tiene un comportamiento superior en carretera.

Desde entonces, varios modelos han perpetuado este comportamiento en carretera, entre ellos la berlina 308 y el SUV 3008. ¿Qué tienen en común? Ambos incorporan el PEUGEOT i-Cockpit. 

Al redefinir totalmente los códigos del puesto de conducción, gracias en particular al volante compacto, la Marca del León ha permitido a todos los automovilistas experimentar en primera persona esta sensación de precisión. De los SUV a las furgonetas, pasando por las berlinas, toda la gama actual se beneficia, a su manera, de un comportamiento especial en carretera. 

Y eso no va a cambiar, ya que esta característica se sitúa en lo más alto de las especificaciones de desarrollo de cada nuevo modelo. El E-3008 promete ser un placer de conducir.

Usted también puede experimentar el famoso comportamiento en carretera de PEUGEOT probando un modelo de nuestra gama en su punto de venta más cercano.