CONDUCCIÓN SOBRE NIEVE: NUESTROS 5 CONSEJOS DE SEGURIDAD
1 Febrero
6 minutos de lectura
¿Quieres recibir nuestras newsletters? Apúntate
Consejo 1: Prepara tu viaje
Antes de salir a la carretera, puedes anticiparte y preparar tu viaje siguiendo unos sencillos pasos:
Planifica tu ruta trazando el recorrido completo. Por supuesto, el GPS te guiará a lo largo de la ruta, pero tener en mente las distintas etapas y el tiempo de conducción necesario te permitirá planificar una hora de salida adecuada. Esto te dará tranquilidad, que es importante para mantener la concentración y conducir con seguridad.
Comprueba las condiciones del tráfico antes de salir de casa. Consulta la previsión meteorológica para tu viaje y la información sobre el tráfico para anticiparte a cualquier posible contratiempo. Manténte alerta, ya que el tiempo en la montaña cambia a menudo y muy deprisa. Además, elige las carreteras principales, ya que la mayoría están limpias de nieve, arena o sal.
Cuando salgas, asegúrate de llevar calzado seco y cómodo. Procura evitar que entre nieve en el coche: cuando se derrita, formará charcos y los pedales resbalarán.
Consejo 2: Revisa tu vehículo
Cuando empiece el invierno, tómate el tiempo necesario para revisar tu vehículo, así no te pillará desprevenido cuando salgas a la carretera durante una nevada. A continuación te indicamos algunos puntos importantes que debes revisar:
Sustituye los filtros y cambia el aceite si es necesario.
Comprueba el estado de los limpiaparabrisas.
Asegúrate de que la batería funciona correctamente: si falla, el frío se convertirá en tu peor enemigo.
Rellena el líquido limpiaparabrisas con anticongelante.
Los coches eléctricos son más sensibles a las bajas temperaturas, sobre todo en términos de autonomía. Esto se debe a que, mientras que un coche con motor de combustión genera mucho calor residual, los motores de los vehículos eléctricos convierten casi toda la energía producida para propulsar el vehículo sin pérdidas. Si viajas con un vehículo eléctrico o híbrido enchufable, aquí tienes algunos consejos específicos que te ayudarán a maximizar la duración de la batería:
Asegúrate de que siempre te queda un 20% de nivel de carga para calentar la batería al arrancar.
Carga la batería preferiblemente una hora antes de salir para beneficiarte del calor del sistema de carga.
Cuando el coche aún esté enchufado, aprovecha para preacondicionar la batería calentándola desde el interior.
Durante el viaje, utiliza la calefacción de los asientos en lugar de la del habitáculo: consume mucho menos energía.
Los coches eléctricos son más sensibles a las bajas temperaturas, sobre todo en términos de autonomía. Esto se debe a que, mientras que un coche con motor de combustión genera mucho calor residual, los motores de los vehículos eléctricos convierten casi toda la energía producida para propulsar el vehículo sin pérdidas. Si viajas con un vehículo eléctrico o híbrido enchufable, aquí tienes algunos consejos específicos que te ayudarán a maximizar la duración de la batería:
Asegúrate de que siempre te queda un 20% de nivel de carga para calentar la batería al arrancar.
Carga la batería preferiblemente una hora antes de salir para beneficiarte del calor del sistema de carga.
Cuando el coche aún esté enchufado, aprovecha para preacondicionar la batería calentándola desde el interior.
Durante el viaje, utiliza la calefacción de los asientos en lugar de la del habitáculo: consume mucho menos energía.
Consejo 3: Ten a mano el equipamiento adecuado
Antes de un viaje por una carretera nevada, es esencial disponer de un equipamiento mínimo para hacer frente a las inclemencias del tiempo:
Un rascador para el hielo o un cepillo especial (equipo obligatorio según el Código de Circulación) y, si es necesario, un spray descongelante.
Una linterna y ropa de abrigo para circular de noche.
Una bolsa impermeable para guardar las cadenas mojadas o los calcetines para la nieve (así se evita la condensación y, por tanto, el vaho en el interior del coche).
Pinzas para recargar la batería.
Antes de un viaje por una carretera nevada, es esencial disponer de un equipamiento mínimo para hacer frente a las inclemencias del tiempo:
Un rascador para el hielo o un cepillo especial (equipo obligatorio según el Código de Circulación) y, si es necesario, un spray descongelante.
Una linterna y ropa de abrigo para circular de noche.
Una bolsa impermeable para guardar las cadenas mojadas o los calcetines para la nieve (así se evita la condensación y, por tanto, el vaho en el interior del coche).
Pinzas para recargar la batería.
Cadenas y cadenas textiles para la nieve
Las cadenas o las cadenas textiles de nieve pueden ser a veces obligatorias para circular por la montaña o en caso de fuertes nevadas. Dependiendo del país, la legislación exige a veces que todos los vehículos lleven un equipamiento especial para circular por determinadas partes de la red de carreteras.
En cualquier caso, por tu seguridad, las cadenas o las cadenas textiles son imprescindibles si tienes previsto ir a la montaña pero no quieres invertir en neumáticos de nieve.
Sin embargo, no elijas tus cadenas a la ligera y ten en cuenta los siguientes criterios:
Tamaño del eslabón: de entre 7 y 9 mm para vehículos ligeros, 13 y 16 mm para vehículos medios, 25 mm para vehículos pesados.
Dimensiones de los neumáticos: elige modelos compatibles con las dimensiones que figuran en el lateral de tus neumáticos.
Las cadenas textiles para nieve son más ligeras y fáciles de montar, y también más baratas. Sin embargo, son menos fiables y deben reservarse para un uso ocasional y en terrenos con poca acumulación de nieve.
Las cadenas o las cadenas textiles de nieve pueden ser a veces obligatorias para circular por la montaña o en caso de fuertes nevadas. Dependiendo del país, la legislación exige a veces que todos los vehículos lleven un equipamiento especial para circular por determinadas partes de la red de carreteras.
En cualquier caso, por tu seguridad, las cadenas o las cadenas textiles son imprescindibles si tienes previsto ir a la montaña pero no quieres invertir en neumáticos de nieve.
Sin embargo, no elijas tus cadenas a la ligera y ten en cuenta los siguientes criterios:
Tamaño del eslabón: de entre 7 y 9 mm para vehículos ligeros, 13 y 16 mm para vehículos medios, 25 mm para vehículos pesados.
Dimensiones de los neumáticos: elige modelos compatibles con las dimensiones que figuran en el lateral de tus neumáticos.
Las cadenas textiles para nieve son más ligeras y fáciles de montar, y también más baratas. Sin embargo, son menos fiables y deben reservarse para un uso ocasional y en terrenos con poca acumulación de nieve.
Neumáticos de nieve
Los neumáticos de invierno ofrecen mayor seguridad y son muy eficaces para circular sobre la nieve.
Para la conducción ocasional, no es necesario plantearse esta cuestión, pero si vas habitualmente a las montañas, tener un juego completo de neumáticos de invierno es una inversión que se amortizará rápidamente.
Cada país tiene una legislación diferente sobre la obligación de utilizar neumáticos de invierno. Algunos países exigen neumáticos de invierno durante un periodo concreto, otros los exigen en determinadas condiciones climáticas o según una señalización específica, y algunos países directamente no los exigen... Para saber más sobre la normativa de los neumáticos de nieve en los distintos países, haz clic aquí.
Consejo 4: Controla tu velocidad
La nieve tiene un coeficiente de adherencia bajo y, por lo tanto, requiere un alto grado de seguridad y anticipación. El principal peligro sigue siendo el hielo o hielo de color negro, que casi no ofrece agarre. Además, el hielo negro es escurridizo y puede enmascararse sobre una capa muy ligera de polvo.
Por lo tanto, sobre nieve es importante no acelerar nunca, aunque la sensación de conducción y las reacciones de tu coche sean buenas.
Conduce tu vehículo despacio y con suavidad, incluyendo el frenado, la dirección, la aceleración y el cambio de marchas.
Acelera suavemente a bajas revoluciones y cambia de marcha lo más rápido posible.
Mantén una mayor distancia de seguridad entre tu coche y el vehículo que tienes delante.
Si el coche empieza a derrapar, no te asustes. Contrólalo suavemente. No lo sueltes.
Enciende los faros. Si la visibilidad es inferior a 100 metros, enciende las luces antiniebla. Pero recuerda apagarlas cuando la visibilidad mejore.
Si las carreteras no están cubiertas de arena, evita circular por las huellas de otros vehículos: la nieve compacta es más resbaladiza que la nieve fresca.
CONSEJO 5: APRENDE A FRENAR
Si te encuentras con una placa de hielo o una mezcla de nieve y hielo, conduce suavemente sin hacer movimientos bruscos.
Si tienes que reducir la velocidad o detenerte, utiliza primero el freno motor y luego los frenos, pero ten mucho cuidado.
Elige la trayectoria correcta, preferiblemente poniendo las ruedas en la nieve en polvo, aunque debes estar preparado para corregir rápidamente cualquier desviación que pueda sufrir tu coche.
En caso de emergencia, puedes seguir utilizando las paredes de nieve de los laterales, que son muy eficaces para frenar un coche sin dañarlo, pero ¡cuidado con las zanjas!
Recomendaciones de un experto: Sylvain Pussier, campeón de conducción sobre hielo
"Soy agente de PEUGEOT en la región de Ain y, además de vender y reparar coches, tengo la suerte de poder participar en múltiples carreras. He disputado bastantes campeonatos para la marca PEUGEOT en fórmulas de promoción y me he especializado en carreras sobre hielo.
Al principio, era piloto de un equipo y, con el tiempo, fundé el mío propio. Diseñamos y construimos nuestro propio coche sobre la base de un 208. En al actualidad, compito cada fin de semana contra grandes referentes del automovilismo como Sébastien Loeb o Yvan Muller. Empezamos como un equipo amateur que se convirtió en profesional, y a día de hoy hemos alcanzado un alto nivel de rendimiento que nos permite competir contra los mejores pilotos de la disciplina".
"Soy agente de PEUGEOT en la región de Ain y, además de vender y reparar coches, tengo la suerte de poder participar en múltiples carreras. He disputado bastantes campeonatos para la marca PEUGEOT en fórmulas de promoción y me he especializado en carreras sobre hielo.
Al principio, era piloto de un equipo y, con el tiempo, fundé el mío propio. Diseñamos y construimos nuestro propio coche sobre la base de un 208. En al actualidad, compito cada fin de semana contra grandes referentes del automovilismo como Sébastien Loeb o Yvan Muller. Empezamos como un equipo amateur que se convirtió en profesional, y a día de hoy hemos alcanzado un alto nivel de rendimiento que nos permite competir contra los mejores pilotos de la disciplina".
Aspectos básicos de la conducción sobre hielo
Neumáticos
"Puedes tener al mejor piloto del mundo, pero si no tiene los neumáticos adecuados, no será capaz de avanzar o girar al final de la recta. Así que lo más importante es el neumático y el agarre.
Corremos con neumáticos con clavos (250 clavos por neumático). Cuando un neumático se calienta, se dilata y, al dilatarse, los tacos se salen un poco de su alojamiento. Para nosotros, la dificultad está en hacer que el neumático funcione de una determinada manera para crear el mejor agarre. Nuestro rendimiento depende en gran medida de los neumáticos. En mi equipo somos 14 personas y 2 de ellas se dedican exclusivamente a los neumáticos. Estas personas analizan, miden y prueban los neumáticos para mejorar constantemente el rendimiento".
Reparto de pesos
"El reparto de pesos permite centrar el peso en el centro del vehículo para anular el efecto de la inercia. Debes saber que cada vez que ganas una carrera, coges lo que se llama "lastre" para la siguiente. Así, el primero lleva 60 kg, el segundo 40 kg y el tercero 20 kg. Por tanto, si nos clasificamos entre los tres primeros, tenemos que rehacer todos los reglajes en el taller antes de la siguiente carrera, en función del lastre.
Trabajamos mucho de antemano para prever todo esto y también adquirimos una valiosa experiencia con el tiempo".
Los consejos de Sylvain Pussier para dominar la conducción sobre hielo
"Hay que saber que, pase lo que pase, el exceso de velocidad es lo que provocará el accidente. Ya sea sobre hielo, nieve o incluso asfalto, las leyes de la física significan que si conduces despacio, si te anticipas a las cosas, nunca habrá un accidente. Los accidentes ocurren si conduces demasiado rápido o si no estás suficientemente preparado, sea cual sea la superfície. En cuanto a la conducción sobre hielo, aunque tengas unos clavos estupendos, si te sales de la carretera es porque ibas demasiado rápido en comparación con lo que puede aguantar el coche.
Hay que saber medir el agarre y, aunque algunas personas lo tienen instintivamente, otras lo adquieren con el paso del tiempo. De ahí la importancia de empezar despacio.
Para conducir sobre nieve, cuanto más estrechos sean los neumáticos, menor será el riesgo de derrape porque la superficie en el suelo es menor. Además, los vehículos antiguos como el 2CV o el 4L no necesitaban neumáticos de nieve para circular sobre nieve porque los neumáticos originales eran mucho más estrechos que los actuales".
"Por último, debes saber que, en cuanto al equipamiento para conducir sobre nieve o hielo, es mejor no poner nada que poner solo 2 neumáticos de nieve. Por ejemplo, un PEUGEOT es un coche de tracción delantera, por lo que son las ruedas delanteras las que mueven el coche. Si creas agarre con neumáticos de nieve delante pero no pones ninguno detrás, esto es lo que ocurrirá: el conductor ganará confianza al arrancar gracias al agarre de los neumáticos de nieve delanteros. Acelerará y en la primera curva, la parte trasera, que no lleva neumáticos de nieve, patinará y hará un trompo.
Si no lleva neumáticos de nieve, al menos no arrancará porque el coche derrapará inmediatamente. Esta situación tiene la ventaja añadida de que el conductor es consciente del estado del suelo. Así que lo ideal es 4 neumáticos o nada.
Una situación parecida me ocurrió un día que estaba devolviendo el coche de un cliente. Como piloto del Trofeo Andros que soy, tenía agarre así que me dije "está bien, aguanta la carretera". No pensé que sólo había dos neumáticos. En la primera curva, ¡había volcado! Y ya está, ¡así de fácil! ".
"Por último, debes saber que, en cuanto al equipamiento para conducir sobre nieve o hielo, es mejor no poner nada que poner solo 2 neumáticos de nieve. Por ejemplo, un PEUGEOT es un coche de tracción delantera, por lo que son las ruedas delanteras las que mueven el coche. Si creas agarre con neumáticos de nieve delante pero no pones ninguno detrás, esto es lo que ocurrirá: el conductor ganará confianza al arrancar gracias al agarre de los neumáticos de nieve delanteros. Acelerará y en la primera curva, la parte trasera, que no lleva neumáticos de nieve, patinará y hará un trompo.
Si no lleva neumáticos de nieve, al menos no arrancará porque el coche derrapará inmediatamente. Esta situación tiene la ventaja añadida de que el conductor es consciente del estado del suelo. Así que lo ideal es 4 neumáticos o nada.
Una situación parecida me ocurrió un día que estaba devolviendo el coche de un cliente. Como piloto del Trofeo Andros que soy, tenía agarre así que me dije "está bien, aguanta la carretera". No pensé que sólo había dos neumáticos. En la primera curva, ¡había volcado! Y ya está, ¡así de fácil! ".
