Los faros son parte integrante de la historia del automóvil. Desde el principio, hemos tenido que encontrar la manera de orientarnos en la oscuridad. Más que su función de iluminación, son el elemento de estilo en el que primero nos fijamos. Después de medio siglo dominado por los faros halógenos y luego xenón, la llegada de la tecnología LED ha provocado una revolución estilística. Philippe Poilâne, Jefe de Diseño de Iluminación y Ruedas de PEUGEOT, hace un repaso de esta revolución.

La supremacía de los LED no se produjo de la noche a la mañana en PEUGEOT. Al principio, se utilizaron con fines de señalización, como en las luces traseras del 307 CC de 2003, el primer león equipado con LED. Hubo que esperar otros diez años para que el 308 de segunda generación se equipara con verdaderos faros. El impacto de esta tecnología puede apreciarse en la transformación del departamento de Iluminación de PEUGEOT. De un equipo ultra reducido, una docena de personas trabajan ahora con Philippe Poilâne para crear firmas luminosas cada vez más espectaculares.

Aquí es donde el LED ha tenido mayor influencia. La miniaturización del diodo da a los diseñadores libertad para crear formas complejas, mientras que las halógenas les limitaban a unidades de faros más sencillas. Las fuentes LED se disponen a lo largo de la forma luminosa deseada, extendiéndose hasta la parrilla del radiador. Los concept cars Fractal e Instinct, desvelados en 2015 y 2017 respectivamente, ilustran a la perfección este campo de posibilidades sin precedentes. Y como todo PEUGEOT debe ser reconocible al instante, de día o de noche, los diseñadores de la compañía han actualizado la famosa firma de tres garras que apareció por primera vez en los faros del legendario 504 Coupé. Desde hace diez años, se utiliza en la parte trasera de los modelos PEUGEOT, así como en los frontales de las últimas generaciones: el 208, el E-208 , el 508 y el nuevo E-3008.  Una década durante la cual las tres garras han entrado en la memoria colectiva de los automovilistas. 

El E-3008 lleva el diseño a un nuevo nivel. La firma del diseñador, simbolizada por la firma luminosa de tres garras, se ha fundido en la parrilla del radiador sin ninguna delimitación, creando un aspecto inédito. Todo un reto para los equipos de Philippe Poilâne, que han tenido que encontrar la síntesis adecuada entre estos dos elementos tan diferentes, característicos del frontal del SUV. El SUV también incorpora la tecnología inteligente Pixel LED, capaz de proyectar constantemente el haz de luz más brillante disponible sin deslumbrar a los demás usuarios de la carretera. En otras palabras, puedes permanecer a plena luz sean cuales sean las condiciones: el coche se encarga de todo. Una proeza posible gracias a la presencia de 22 píxeles totalmente independientes (cada uno de los cuales representa un LED) por faro. Aunque este avance tecnológico no afecta al diseño de los faros, según Philippe Poilâne, estamos lejos de haber explorado todas las posibilidades que ofrecen los LED. El futuro parece prometedor.